En conmemoración del Día Mundial Sin Tabaco, las Secretaría de Salud de Boyacá, se une para proteger a los niños, niñas y adolescentes. / FOTO: Gobernación de Boyacá

En conmemoración del Día Mundial Sin Tabaco, la Gobernación de Boyacá, a través de la Secretaría de Salud, ha anunciado su compromiso con las directrices nacionales para proteger a los niños, niñas y adolescentes del consumo de tabaco, sucedáneos e imitadores. Estos productos son conocidos por provocar diversas enfermedades tanto en los consumidores como en quienes los rodean, generando un impacto significativo en la salud pública.

Una Amenaza Global

Para empezar, Martha Veira Andrade, referente de Vida Saludable y Enfermedades no Transmisibles de la Secretaría de Salud, subrayó la gravedad de la situación. “El tabaco es una de las mayores amenazas para la salud pública que ha tenido el mundo en la historia más reciente. En Colombia, para el 2019, de acuerdo con la encuesta nacional de consumo de sustancias psicoactivas, la prevalencia del consumo de tabaco estaba en el 9.75%, siendo las personas de 25 a 31 años los mayores consumidores”, destacó Veira Andrade.

Boyacá en el Contexto Nacional

Por otro lado, los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) revelan una realidad alarmante: Boyacá ocupa el segundo lugar en el país en consumo de tabaco dentro de la población de los 12 a los 65 años, solo superado por Cundinamarca. Esta estadística subraya la necesidad de implementar medidas urgentes y efectivas para reducir el consumo de tabaco en la región.

Esfuerzos Conjuntos y Legislación

En consecuencia, “es de vital importancia que se trabaje mancomunadamente para dar a conocer los peligros que supone el consumo de tabaco, sus derivados, sucedáneos e imitadores de estos productos”, recalcó Veira Andrade. La colaboración entre entidades gubernamentales, organizaciones de salud y la comunidad es esencial para abordar este problema de salud pública.

A nivel mundial, el impacto del tabaco y los aerosoles de vapeadores es devastador, causando la muerte de más de 7 millones de personas al año, de las cuales más de 6 millones son consumidores directos. Este panorama ha llevado a la necesidad de fortalecer las políticas de control del tabaco.

En Colombia, se espera que el Gobierno nacional haga el anuncio oficial de la sanción y la promulgación de una nueva ley que regulará los productos sucedáneos e imitadores de tabaco, en línea con la actual Ley 1335 de 2009. Esta legislación busca reforzar las medidas de control y protección de la salud pública frente a los riesgos asociados al consumo de tabaco y sus derivados.

Iniciativas Locales y Concienciación

Por lo tanto, la Secretaría de Salud de Boyacá está impulsando diversas campañas de concienciación para informar a la población sobre los peligros del tabaco y promover hábitos de vida saludable. Estas iniciativas incluyen talleres educativos en escuelas, campañas publicitarias en medios de comunicación y actividades comunitarias que fomentan un entorno libre de humo.

Asimismo, se están desarrollando programas específicos para ayudar a los fumadores a dejar el hábito, proporcionando apoyo psicológico y médico. Además, la promoción de espacios públicos libres de humo es otra de las estrategias clave que se están implementando en Boyacá.

Protección de los Jóvenes

De manera similar, uno de los enfoques principales es la protección de los niños, niñas y adolescentes, quienes son especialmente vulnerables a los efectos del tabaco y los productos similares. La Secretaría de Salud está trabajando en colaboración con las instituciones educativas para integrar programas de prevención y educación sobre los riesgos del tabaco desde edades tempranas.

Conclusión

En resumen, el Día Mundial Sin Tabaco sirve como un recordatorio de la importancia de continuar luchando contra el consumo de tabaco y sus derivados. La Gobernación de Boyacá, junto con la Secretaría de Salud, reafirma su compromiso en esta causa, adoptando medidas concretas y promoviendo la concienciación sobre los peligros asociados al tabaco. Solo a través de esfuerzos conjuntos y una legislación robusta, se podrá proteger la salud de la población y garantizar un futuro más saludable para las nuevas generaciones.

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