Bogotá, D.C., 14 de diciembre de 2020 / Durante el 2020 la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca -CAR- ha retirado un millón 19 mil metros cúbicos de sedimento de la laguna de Fúquene, con lo que se han recuperado 71 hectáreas de espejo de agua. 

Así lo confirmó el director general de la Corporación, Luis Fernando Sanabria, quien este lunes expuso ante el Procurador general, Fernando Carrillo, los principales avances del proyecto para recuperar este ecosistema, durante el III Encuentro por la protección de las lagunas de Tota y Fúquene, que llevó a cabo la Procuraduría General de la Nación en el puerto de Guatancuy.  

De acuerdo con el director, mensualmente se recuperan 10 hectáreas del cuerpo lagunar gracias a que se retiran en promedio 197.000 metros cúbicos de sedimentos para lo cual se fortaleció el banco de maquinaria con la adquisición de 36 nuevos equipos entre retroexcavadoras anfibias (11), retroexcavadoras orugas (8) y barcazas de transporte de material (8), además de volquetas y bulldozer, con las que se completan 76 máquinas empleadas en el frente de obra. 

“Le apostamos no solo a la recuperación de este cuerpo lagunar sino que buscamos una recuperación integral de toda el área protegida delimitada en el sector de la cuenca alta del río Suárez con el fin de tener un ecosistema apto para que la fauna y la flora puedan interconectarse a través de corredores ecológicos”, explicó Sanabria.

Con las acciones que desarrolla la Corporación en el proyecto de recuperación, se benefician alrededor de 650 mil personas que habitan en la zona de influencia con diferentes componentes como las técnicas de producción, principalmente pecuarias, que se han transformado para ser amigables con el ecosistema, lo que influye en la disminución de carga contaminante que llega a la laguna. 

También se ha fortalecido el trabajo con los artesanos de la zona, quienes hoy extraen el junco del material vegetal que se retira de la laguna con el cual elaboran sus canastos y demás productos que comercializan en la región. 

Procurador, Fernando Carrillo y Director CAR, Fernando Sanabria

Además, la Corporación tiene previsto un proyecto para que el material que se extrae se aproveche y se convierta en un abono orgánico que sirva para recuperar las áreas degradadas de la cuenca. Por ahora, el sedimentado se lleva a los predios periféricos que tenían problemas de inundación para ayudarles a disminuir este riesgo.  

“El impacto de todas estas acciones sobre la región de Fúquene, Cucunubá y Palacio se refleja en el regreso de la fauna, el restablecimiento de los servicios ecosistémico y la adaptación de este ecosistema al cambio climático por medio del aumento de la capacidad de regulación hidráulica de las lagunas aquí presentes. Es una labor institucional ardua, para mitigar en pocos años, lo que por siglos ha sufrido esta laguna”, dijo el director de la CAR. 

Entretanto, el procurador general, Fernando Carrillo, hizo un llamado a los empresarios y a quienes habitan en la zona de influencia de la laguna, a apropiarse de la protección de este ecosistema, y a los organismos judiciales a actuar con contundencia frente a quienes cometen acciones ilegales:

“cambiar esa actitud humana, que ha sido el daño grande que se le ha hecho al ecosistema, tiene que ser un elemento fundamental dentro del proceso de protección de la laguna de Fúquene. Necesitamos sanciones de carácter penal contra los depredadores del medio ambiente, actuar contundentemente frente a quienes hacen vertimentos ilegales, por ejemplo”, dijo el Procurador. 

Monitoreo 24/7

La CAR instaló en puntos estratégicos de la laguna seis plataformas acuáticas, que funcionan con paneles solares, para monitorear variables como la calidad del agua.

“Realizamos monitoreo, control y vigilancia, diurna y nocturna, utilizando video analítica para identificar movimiento de personas o vehículos, en este caso botes; y se inspeccionan los vertimientos, la pesca ilegal o la invasión”, explicó. 

La meta de la Corporación es que a 2023 haya recuperado por lo menos 500 hectáreas de espejo de agua y retirado más de 9 millones de metros cúbicos de sedimentos. Según lo destacó el director general, este el segundo proyecto con mayor inversión por parte de la CAR.

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