La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha anunciado dos importantes estrategias que marcarán el camino hacia la recuperación del Complejo Lagunar Fúquene, Cucunubá y Palacio, uno de los cuerpos hídricos más importantes para Boyacá y Cundinamarca. Este anuncio se realizó en el marco del conversatorio «Fúquene: la leyenda dormida por décadas», donde se discutieron los principales retos que enfrenta este ecosistema en crisis.
Primera estrategia: Descontaminación de aguas residuales
Durante el evento, la CAR presentó una propuesta en colaboración con la Fundación Humedales para trabajar en la descontaminación de las aguas residuales que afectan a los municipios de la provincia de Ubaté. Este es un paso crucial, ya que la contaminación de estas aguas ha sido uno de los factores que ha acelerado el deterioro del ecosistema de la Laguna de Fúquene.
El apoyo de la Fundación Humedales será clave en este esfuerzo, que no solo busca mejorar la calidad del agua, sino también generar un impacto positivo en la biodiversidad y la calidad de vida de las comunidades locales. Con estas acciones, la CAR se compromete a restaurar uno de los recursos naturales más valiosos de la región.
Segunda estrategia: Restauración ambiental integral
El director general de la CAR, Alfred Ballesteros Alarcón, también presentó una segunda propuesta: consolidar un modelo integral de restauración ambiental para la Laguna de Fúquene. Este plan contará con la colaboración de la organización Conservación Nacional y la Universidad Javeriana. La idea es diseñar un enfoque a largo plazo que no solo permita restaurar el ecosistema, sino también generar resiliencia ante los efectos del cambio climático.
Ballesteros Alarcón destacó que la recuperación de este ecosistema tardará décadas, ya que ha sido afectado durante siglos. A pesar de ello, las primeras acciones que se están tomando representan un avance significativo en el proceso.
Retos frente al cambio climático y biodiversidad
Uno de los escenarios claves para debatir sobre los retos de la Laguna de Fúquene será la COP 16, donde se espera que la conservación de este ecosistema sea uno de los temas principales. Según el director de la CAR, es fundamental que la comunidad internacional se involucre en los esfuerzos de recuperación.
«No venimos a decir que en Fúquene ya se hizo la tarea, sino a visibilizar la problemática de este ecosistema lagunar y a encontrar aliados en su recuperación», señaló Ballesteros Alarcón, enfatizando la necesidad de generar una conciencia colectiva sobre la importancia de este cuerpo de agua.
La academia y las organizaciones se suman al esfuerzo
Fabio Arjona, vicepresidente de Conservación Internacional Colombia, también participó en el conversatorio, destacando la urgencia de mejorar las acciones de recuperación del humedal. Por su parte, el profesor Germán Jiménez, de la Universidad Javeriana, subrayó la necesidad de implementar acciones a mediano y largo plazo que apunten a la restauración de la biodiversidad y a un cambio en el comportamiento de las comunidades locales frente al ecosistema.
Así las cosas, la recuperación de la Laguna de Fúquene es una tarea titánica que requiere del compromiso de diversas instituciones y comunidades. Las estrategias presentadas por la CAR son un paso fundamental en el camino hacia la restauración de este valioso ecosistema, pero el éxito dependerá de la colaboración de todos los actores involucrados.
Con estas acciones, se espera que la Laguna de Fúquene recupere su esplendor, garantizando un futuro sostenible para las generaciones venideras.