El paro campesino que inició el pasado 21 de octubre en Boyacá, convocado por las comunidades campesinas parameras, ha comenzado a generar fuertes repercusiones en los municipios aledaños a Paipa, punto central de las manifestaciones. El gobierno departamental ha emitido un informe actualizado sobre los sectores más afectados tras el segundo día de paro, presentando un panorama complicado en términos de abastecimiento, movilidad y manejo de residuos.

Desabastecimiento de combustible afecta 10 municipios

La falta de combustible es una de las principales problemáticas en esta jornada. Hasta el momento, se reporta que 10 municipios, incluidos Santa Rosa, Sogamoso, Pesca, y Duitama, se encuentran en situación crítica de desabastecimiento. De estos, siete localidades solo cuentan con reservas de combustible para uno o dos días, mientras que tres municipios como Tibasosa, Firavitoba y Belén tienen reservas suficientes para tres a cinco días.

Además, en Belén se presentan complicaciones en el transporte público, mientras que en Pesca la problemática afecta al transporte escolar, poniendo en riesgo la movilidad de estudiantes.

140.000 litros de leche represados

La situación también ha impactado el sector agrícola, con aproximadamente 140.000 litros de leche represados en Belén, Firavitoba, Iza y Tibasosa, lo que representa un fuerte golpe para los productores locales, quienes enfrentan dificultades para comercializar sus productos debido a los bloqueos.

Represamiento de basuras en siete municipios

Otro de los sectores afectados es la gestión de residuos sólidos. En total, se reporta el represamiento de 210 toneladas de basura en municipios como Belén, Nobsa, Pesca y Santa Rosa de Viterbo. Esta situación podría generar problemas de salubridad si no se restablece la normalidad en los próximos días.

Reducción de pasajeros en los terminales de transporte

El impacto del paro también se siente en la movilidad de los habitantes. Según el Instituto de Tránsito de Boyacá (ITBOY), en los terminales de Tunja, Duitama, Sogamoso y Chiquinquirá, más de 33.700 pasajeros han dejado de movilizarse en los últimos dos días, mientras que cerca de 8.000 despachos de vehículos han sido cancelados.

Los destinos más afectados incluyen Bucaramanga, Cúcuta, Bogotá y Yopal, con múltiples rutas suspendidas, lo que afecta significativamente la conectividad entre las principales ciudades del departamento y otras regiones del país.

Ante esta situación, la Gobernación de Boyacá continúa haciendo seguimiento a los efectos del paro y ha manifestado su intención de abrir canales de diálogo con las comunidades campesinas para encontrar soluciones que permitan aliviar la tensión y garantizar el abastecimiento de los municipios afectados.

El avance del paro y su impacto en sectores claves como el combustible, los alimentos y el transporte sigue siendo motivo de preocupación, y se espera que en los próximos días se logre una salida concertada que evite mayores complicaciones para los habitantes del departamento.

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